El Aqidah

El Imám Muhammad Ibn Ismail al-Bukhari[1] (رحمه الله) dijo: “Yo encontré a más de un millar de hombres de entre la gente de conocimiento, la gente de al-Hiyaz, Makkah, al-Madinah, Al-Kufah, al-Basrah, Wasit, Bagdad, Ash-Sham y Egipto. Yo me encontré con ellos repetidamente generación tras generación y luego generación tras generación. Yo los alcancé mientras ellos habían sido dispersados por más de cuarenta y seis años; la gente de Ash-Sham, Egipto y Mesopotamia dos veces, y Al-Basrah cuatro veces en un número de años. Yo me encontré con la gente de al-Hiyaz por seis años. Y no puedo contar cuantas veces yo he entrado en Kufah y Bagdad junto con los muhadithin de la gente de Khurasan. De entre ellos estaban: al-Maki Ibn Ibrahim (muerto en el 214 H) Yahya Ibn Yahya (muerto en el 226 H); Ali Ibnul Hasan Ibn Shaqiq (muerto en el 215 H), Qutaybah Ibn Said (muerto en el 240 H) y Shihab Ibn Mamar.
Y en Ash-Sham: Muhammad Ibn Yusuf al-Firyabi (muerto en el 212 H), Aba Mushir Abdul Ala Ibn Mushi (muerto en el 218 H); Abdul Mugirá Abdul-Qudus Ibnul Hayay (muerto en el 212 H), Abul Yaman al-Hakam Ibn Nafi (muerto en el 222 H) y un largo número después de ellos.

Y en Egipto: Yahya Ibn Kathir (muerto en el 231 H), Abu Salih (muerto en el 223 H) el escriba de al-Layth Ibn Sad (muerto en el 175 H), Said Ibn Abi Maryam (muerto en el 224 H), Asbagh Ibnul Faray (muerto en el 225 H), y Nuaym Ibn Hamad (muerto en el 229 H).
Y en Makkah: Abdullah Ibn Yazid al-Muqri (muerto en el 213 H), al-Humaydi (muerto en el 229 H), Sulayman Ibn Harb (muerto en el 224 H) el Qadi (juez) de Makkah y Ahmad Ibn Muhammad al-Azraqi (muerto en el 222 H).

Y en al-Madinah: Ismail Ibn Abi Uways (muerto en el 226 H), Mutraf Ibn Abdullah (muerto en el 220 H), Abdullah Ibn Nafi az-Zubayri (muerto en el 216 H), Muhammad Ibn Abi Bakr (muerto en el 242 H), Aba Musab az-Zuhri, Ibrahim Ibn Hamzah az-Zubayri (muerto en el 230 H) e Ibrahim Ibnul-Mundhir al-Hazami (muerto en el 236 H).

Y en al-Basrah: Aba Asim Ad-Dahak Ibn Makhland ash-Shaybani (muerto en el 212 H); Abdul Walid Hisham Ibn Abdul-Malik (muerto en el 227 H), al-Hayay Ibn Minhal (muerto en el 217 H) y Ali Ibn Abdullah Ibn Yafar al-Madini.

Y en al Kufah: Aba Nuaym Al-Fadl Ibn Dukayn (muerto en el 219 H), Abdullah Ibn Musa (muerto en el 213 H), Ahmad Ibn Yunus (muerto en el 134 H); Qabesah Ibn Aqabah (muerto en el 215 H), Ibn Numayr (muerto en el 234 H) y Abdullah (muerto en el 235 H) y Uthman (muerto en el 239 H) los dos hijos de Ibn Abi Shaybah (muerto en el 235 H).

Y en Bagdad: Ahmad Ibn Hanbal (muerto en el 241 H), Yahya Ibn Main (muerto en el 233 H), Aba Mamar (muerto en el 236 H), Aba Khaythamah (muerto en el 234 H) y Aba Ubayd al-Qasim Ibn Salam (muerto en el 224 H).

Y de la gente de Mesopotamia: Amr Ibn Khalid al-Harrani (muerto en el 229 H).

Y en Wasit: Amr Ibn Awn (muerto en el 225 H), y Asim Ibn Ali Ibn Asim (muerto en el 221 H).

Y en Marw: Sadaqah Ibn Fadl (muerto en el 223 H) e Ishaq Ibn Ibrahim al-Handhali (muerto en el 238 H).

Y nosotros tenemos suficiente con nombrar a esta gente en orden de ser breves y no prolongarlo. Así que yo no vi a ninguno de entre esta gente difiriendo con respecto a estos asuntos:

La Religión es declaración y acción. Y esto es debido a la declaración de Alláh:

“Y ellos no fueron ordenados, excepto para adorar a Alláh, haciendo la Religión sinceramente por Él, siendo Hunaza (absteniéndose de adscribir socios a Alláh) y establecer la oración y pagar el Zakat. Y esta es la Religión recta” (Suratul-Bayinah, 98:5).

Y el Corán es el discurso de Alláh, no es creado, debido a la declaración de Alláh:

“Efectivamente, tu Señor es Alláh quien creó los cielos y la tierra en seis días y luego ascendió (istiwa) sobre el Trono. Él trae la noche como una cobertura sobre el día, buscándola rápidamente, y el sol y la luna y las estrellas están sujetos a su Orden” (Suratul Araf, 7:54).

Abu Abdullah Ibn Muhammad Ibn Ismail dijo: “Ibn Uyaynah dijo: Así que Alláh distinguió entre la creación y la orden con Su declaración”:

“Efectivamente, Él es la creación ya la orden. Bendito sea Alláh, Señor de los Mundos” (Suratul Araf, 7:54).

Y el bien y el mal están en complacencia con el Qadr (el decreto divino), debido a la declaración de Alláh:

“Di: yo busco refugio con el Señor del amanecer, del mal de lo que Él ha creado” (Suratul-Falaq. 113:1-2).

Y Alláh dijo:

“Y Alláh los creó a ustedes y a cualquier cosa que hagan” (Suratus-Safat, 37:96).

Y Alláh dijo:

“Y Nosotros hemos creado todo con Qadr (decreto divino)” (Suratul-Qamar, 54-49).

Y ellos no acostumbraban declarar a cualquiera de entre la gente de la Qiblah un incrédulo debido a un pecado, debido a la declaración de Alláh:

“Efectivamente, Alláh no perdona que el Shirk sea cometido con Él, pero Él perdona cualquier cosa que sea menos que eso de quienquiera que él desee” (Suratun-Nisa, 4:48).

Y yo no vi a nadie de entre ellos difamando a los Compañeros de Muhammad (صلى الله عليه وسلم). Aishah (رضي الله عنها) dijo: “Ellos fueron ordenados para buscar el perdón de ellos”. Y es debido a la declaración de Alláh:

“Y aquellos que vinieron después de ellos dicen: ¡Señor Nuestro! Perdónanos y a nuestros ancestros quienes nos precedieron en el Imán, y no pusieron en nuestros corazones ningún odio contra aquellos quienes han creído. ¡Señor Nuestro! Tú eres efectivamente el lleno de bondad, el Más Misericordioso” (Suratul-Hashr, 59:10).

Y ellos acostumbraban prohibir las innovaciones, sobre las cuales no estaban el Profeta (صلى الله عليه وسلم) ni sus Compañeros, debido a la declaración de Alláh:

“Y aférrense a la Cuerda de Alláh todos juntos y no se vuelvan divididos” (Surah Ali Imrán, 3:103).

Y Alláh dijo:

“Y si ellos fueran a seguirlo, ellos se volverían guiados” (Suratun-Nur, 24:54).

Y ellos acostumbraban unirse a cualquier cosa sobre la que estaba el Profeta (صلى الله عليه وسلم), debido a la declaración de Alláh:

“Esta es Mi Vía Recta, así que síganla. Y no sigan las (otras) vías desde que ellas los separarán de Su Vía. Esto es lo que Él ha ordenado para ustedes para que así, quizá se vuelvan piadosos” (Suratul An-Nam, 6:153).

Y nosotros no contendemos en la autoridad con su gente, debido a la declaración del Profeta (صلى الله عليه وسلم): “Hay tres cosas hacia las cuales el corazón de un musulmán no muestra rencor: (1) actuar sinceramente por Alláh, (2) obediencia hacia los gobernantes, (3) y adherirse al Yama-ah (cuerpo unido de musulmanes). Desde que su suplicación comprende a aquellos quienes están detrás de ellos”[2].

Luego esto es, más adelante, confirmado por la declaración de Alláh:

“Obedezcan a Alláh, obedezcan al Mensajero y a aquellos en la autoridad de entre ustedes” (Suratun-Nisa 4:59).

Y la espada no es para ser erigida contra la Ummah de Muhammad.

Y al-Fudayl (muerto en el 187 H) dijo: “Si yo tuviera una suplicación que fuera contestada, yo no la haría, excepto para el líder, porque si el líder está rectificado los ciudadanos y los sirvientes están seguros”[3].


[1] Él es Abu Abdullah Muhammad Ibn Ismail Ibn Ibrahim al-Bukhari, el Hafidh, el autor de “Al-Yami us Sahih, comúnmente conocido como Sahih al-Bukhari. Él murió en el año 256 H en uno de los pueblos de Samarqand. Refiérase a “Siyar Alamún-Nubala” (12/391471) de Adh-Dhahabi.
[2] Relatado por Ahmad en su Musnad (5/183) sin la adición: “Desde que su suplicación”. Refiérase también a At-Targhib wat Tarhib (1/23), el Musnad (1/14) de Ash-Shafi y “Mayma uz-Zawaid” (1/137) de al-Haythami.
[3] Este credo fue tomado de “Sharh Usulul-Itiqad (1/172-173) de al-Lalikai.



Tomado de: www.sunnahpublishing.net
Traducido (del árabe al inglés) por: Maz Qureshi.
Traducido (del inglés al español) por: Musa Abdullah Reyes H.